La transformación digital ha supuesto una enorme ayuda en la optimización de los procesos productivos de todo tipo de empresas. Ganar en eficiencia significa aumentar la competitividad y mayores posibilidades de destacar en un escenario económico altamente competitivo. Es ahí donde la automatización robótica de procesos adquiere su relevancia.

¿Pero qué es exactamente la automatización robótica de procesos o RPA? De una manera muy esquemática, se trata de implementar en el software un robot capaz de automatizar esas tareas que se realizan en toda empresa y que son repetitivas, están perfectamente estructuradas, se pueden gestionar mediante unas reglas básicas previamente determinadas y, además, se realizan con una frecuencia muy elevada.

Esos trabajos de los que se encarga la automatización robótica de procesos pueden ser muy diferentes y variar según la actividad de la empresa. Entre ellos se pueden destacar algunos básicos como búsqueda de registros, cumplimentación de formularios con información previamente almacenada, creación de informes, contabilidad, servicios IT, abrir correos electrónicos y documentos adjuntos o extraer datos de sitios web.

Una de las grandes ventajas es que todas estas funciones se pueden realizar sin interrupciones en los sistemas subyacentes gracias a la automatización robótica de procesos. Y es aplicable a departamentos de la empresa tan diferentes como logística, cadena de suministros, contabilidad o recursos humanos.

Los grandes beneficios de la RPA

Implementar sistemas de automatización robótica de procesos tiene un coste ínfimo en relación a las enormes ventajas que es posible obtener:

Mayor precisión: el error humano es una posibilidad que existe, sobre todo en tareas muy repetitivas, y que puede tener serias repercusiones. Los robots de software que se encargan de los procesos están programados para realizar su trabajo de una manera precisa y estricta, por lo que el riesgo de error es inexistente.

Flujos de trabajo más ágiles: tareas para las que el personal de la empresa necesita horas, con la automatización robótica de procesos se realizan en minutos, agilizando así la actividad. No solo eso, sino que aligera la presión de trabajo a los empleados, que pueden dedicarse a otras tareas también imprescindibles para el buen desarrollo de la compañía.

Mejora de la eficiencia y la productividad: todo lo anterior se traduce en que la automatización robótica de procesos implica un importante ahorro de recursos con una inversión muy pequeña y que empieza a dar beneficios de manera inmediata. Es decir, el ROI (retorno de la inversión) es muy elevado.

Mejor experiencia de empleados y clientes: cuando es un robot el que realiza las tareas repetitivas, a los empleados se les pueden encomendar otras de mayor valor que suponen un estímulo y un aliciente para mejorar la productividad. Por su parte, la agilidad en las respuestas que permite la automatización robótica de procesos implica también una mayor satisfacción de los clientes.

Escalabilidad: en caso de necesidad, se pueden implementar robots adicionales que optimicen el trabajo en áreas específicas o en momentos de mayor actividad. De esta manera es sencillo responder de inmediato a picos de trabajo.

Planificación precisa: la automatización robótica de procesos implica una optimización en el almacenamiento, recuperación y análisis de datos, esencial para ganar en competitividad. Disponer de métricas fiables y fácilmente localizables siempre juega a favor a la hora de desarrollar planes de mejora y crecimiento de la empresa.

La automatización robótica de procesos es, por tanto, una herramienta esencial para que tu empresa gane en eficiencia. Nada puede sustituir al capital humano, pero si facilitas que su trabajo se centre en tareas de alto valor, su compromiso con la compañía será mayor y revertirá en un aumento de la productividad.

En Ateinco te ayudamos a implementar las soluciones tecnológicas que tu empresa necesita para aumentar su competitividad y colocarse en puestos de cabeza en crecimiento y desarrollo.